Volvemos con esta serie de artículos en la que exponemos lecciones y consejos útiles de personas de éxito, no solo relacionadas con el mundo de la empresa, sino personas que triunfaron en cualquier ámbito de la vida o profesión. Y en este caso le toca a Jack Ma, fundador de Alibaba, del que puedes aplicar muchas lecciones a tu empresa.
Hazte el favor de no rendirte nunca
Fue rechazado en Hardvard 10 veces, y buscando su primer empleo también fue rechazado en más de 30 ocasiones tras graduarse. Una de ellas era para trabajar en un KFC: se presentaban 24 personas a las entrevistas, y contrataron a todas menos a él debido a «su baja estatura y escaso atractivo físico». ¿De quién hablamos? Efectivamente, de Jack Ma, fundador de Alibaba, una empresa que está valorada a día de hoy en más de 20.000 millones de dólares.
¿Qué lección se puede aprender de todo esto? Que (casi) nunca hay que cesar en nuestro empeño de conseguir lo que queremos. Hacer que tu empresa sea rentable puede llevar mucho esfuerzo, pero si de verdad crees en ello, no te detengas.
La experiencia es un éxito en sí misma
Cualquier proyecto, tarea o reto que te haga salir de tu zona de confort es un éxito debido a la cantidad de cosas que tendrás que aprender para superarlo. Si fracasas, seguro que habrás aprendido al menos una cosa (probablemente decenas o cientos, según el tamaño del proyecto).
La tarea de poner en marcha una empresa y hacerla rentable requiere de muchos conocimientos en diferentes áreas, y seguro que aunque fracases habrás aprendido infinidad de cosas y cometido errores que, en tu futura aventura empresarial, ya no cometerás.
Si no conoces bien a tu competencia, mal asunto
Si no tienes competencia, probablemente tampoco tengas negocio (excepto que seas una «empresa unicornio» la mar de innovadora como lo fue Facebook, por ejemplo).
Y, si tienes competencia y no la conoces, estás en una enorme desventaja. Y cuando digo conocerla no es saber de su existencia, sino conocer su producto, sus precios, incluso tener contactos dentro de sus empresas. Ten por seguro que tu competencia hace lo mismo si es una empresa seria.
No seas tan mezquino y arrogante como para pensar que tu competencia no es mejor que tú en algo, o en todo.
Huye de la negatividad
Todos pasamos por malos momentos, nadie es impasible ante la vida y las posibles desgracias con las que esta nos puede obsequiar. Sin embargo, lo que diferencia a la mayoría de personas que han triunfado en sus campos es su capacidad para eliminar la negatividad, y la mejor forma de hacerlo es afrontando los problemas de cara.
Si tienes un problema, resuélvelo. Si no se puede resolver, ignóralo e intenta pensar en él el menor tiempo posible.
Si tu problema es que no te gusta en lo que trabajas y levantarte todos los lunes es como ir al purgatorio, cambia de trabajo. Si te pasa en tu propia empresa, ciérrala cuanto antes.