Desde la aparición de la tarifa plana de autónomos en España son muchas las personas que se han aventurado al emprendimiento pero, ¿cómo saber si puedes tener éxito emprendiendo? Vamos a contártelo en este artículo.
Aunque lo más sencillo es empezar preguntándonos lo contrario: ¿cómo saber si voy a fracasar como emprendedor? Pues si cumples alguno de estos puntos, casi seguro que vas a fracasar:
- Te has lanzado a emprender debido a que no tienes otra alternativa y necesitas trabajar en algo para mantenerte a ti y tu familia.
- Necesitas cobrar un sueldo fijo al mes.
- Tu familia no te apoya.
Si cumples alguno de estos puntos, te aconsejo que salgas del mundo del emprendimiento cuanto antes minimizando pérdidas, porque no es algo para ti y no va a ser sostenible a largo plazo.
En cuanto al primer punto y el segundo, como emprendedor, especialmente cuando empiezas, no sabes si vas a ganar dinero. De hecho lo más probable es que pierdas dinero al principio, por lo que emprender un negocio para ganar dinero inmediato y salir de una crisis financiera personal, por muchas ayudas en forma de tarifa plana de autónomos o similares que tengas, no es buena idea.
Y en cuanto al tercer punto, si tu familia no te apoya va a llegar un momento que tengas que decidir entre tu familia o tu negocio, o que acabes con problemas de salud relacionados con el estrés o la ansiedad antes de que llegues a este punto. Para emprender es fundamental sentir el apoyo de los tuyos.
Y ahora, si para ti estos tres puntos no son un problema, ¿cómo puedes saber si vas a tener éxito emprendiendo?
Que vayas a tener éxito como emprendedor no quiere decir que vaya a ser a la primera, eso que vaya por delante. De hecho lo más probable es que los primeros negocios no triunfen, pero que aprendas y sientes unas bases para saber lo que no tienes que hacer para llevar al éxito una empresa.
Ser capaz de detectar oportunidades e innovar
Una empresa debe proporcionar un conjunto de productos y/o servicios que satisfagan las necesidades de un determinado grupo de personas (clientes).
Detectar necesidades y ser capaz de innovar para cubrirlas es clave. Por supuesto no es suficiente, ya que hay que hacerlo siendo capaz de obtener un beneficio, pero es necesario. Nadie paga por algo que no cubra una necesidad.
Quien paga 1.000 euros por un teléfono móvil es porque tiene la necesidad de saber que está a la última o de demostrar su poder adquisitivo, y quien paga 80 céntimos por una barra de pan es porque tiene la necesidad de comer. Ambos son modelos de negocio totalmente válidos si son rentables.
Resiliencia
Esta es una palabra que me encanta, y es la capacidad que tienen las personas de adaptarse a los inconvenientes que se les presentan en la vida.
En este caso, aplicado a los negocios, decimos que un emprendedor debe tener esta capacidad de resiliencia porque lo que hoy funciona mañana puede no funcionar, siempre aparecen inconvenientes, competencia, nuevos mercados, cambios, imprevistos…
La capacidad de adaptarse a los cambios y dificultades que tenga tu empresa es fundamental para no fracasar a medio y largo plazo.
Zona de confort
Ser capaz de salir de tu zona de confort a menudo y ampliarla es uno de los factores clave para ser mejor emprendedor y, en general, conseguir llegar más lejos en cualquier aspecto de tu vida.
Hay personas para las que es imposible salir de la zona de confort que supone tener un sueldo fijo, aunque detesten su trabajo.
Y otras para las que una vez que su empresa es capaz de cubrir gastos y darle un sueldo digno, se estancan. Nunca debes estancarte, siempre debes salir de tu zona de confort e intentar mejorar tu empresa, diversificar líneas de negocio… e incluso iniciar nuevas empresas.
Por supuesto, hay que tener cabeza y saber tomar riesgos calculados, no hacer locuras, y tener siempre un plan B.
Capacidad para delegar y dirigir
Puedes ser técnicamente un genio en algo y montar una empresa relacionada con ello, pero si no sabes delegar tareas y dirigir un equipo de personas, a la larga no vas a tener éxito. A medida que una empresa crece debe haber personas que se dediquen a tareas concretas, y muchas personas tienen miedo de delegar estas tareas a otras personas.
Otros emprendedores saben delegar pero no saben dirigir y gestionar recursos, no saben motivar a sus empleados o no son capaces de tener una visión general de todo.
Ser capaz de motivar, dirigir un equipo, delegar y gestionar recursos es clave para que tu empresa no quiebre y prospere.
Si cumples la mayoría o todos estos puntos comentados, lo más probable es que llegado el momento consigas llevar una de tus aventuras emprendedoras a buen puerto.